Puede parecer casi imposible y difícil de creer, pero este pequeño gran invento fue desarrollado por un niño de 8 años, su nombre es Fernando Linares y tiene una discapacidad auditiva severa y su gran sueño siempre fue surfear, esto fue lo que lo motivó a diseñar un implante coclear interno y que parezca ser invisible.
Este implante va por dentro del oído y comunica con la cóclea, así se protege de los golpes, tiene una parte fija, una cápsula que funciona como los legos, una batería que se recarga con movimiento y un material que lo hace impermeable.
Aunque el implante diseñado por Fernando tiene muchas mejoras, todavía le falta resolver cuestiones como por ejemplo, lograr que no se apague cuando alguien se baña, duerme o simplemente si se le acaba la batería.